Las infecciones humanas causadas por cestodos, o tenias, pueden producirse en el lumen del intestino, donde los cestodos adultos se adhieren al intestino del huésped (Recuadro 1). Alternativamente, la infección humana puede ser el resultado de la diseminación de los cestodos desde el intestino a sitios extraintestinales, a menudo por formas larvarias del parásito. El ciclo vital de los cestodos está determinado por los hospedadores definitivos, en los que vive el gusano adulto maduro, y los hospedadores intermediarios, que albergan las formas larvarias del parásito.
El ser humano es el hospedador definitivo de seis cestodos: Diphyllobothrium latum, Taenia solium, Taenia saginata, Hymenolepis diminuta, Hymenolepis nana y Dipylidium caninum. Además, los humanos pueden ser huéspedes intermediarios de Echinococcus granulosis y Echinococcus multilocularis. Todas las formas de enfermedad asociadas a infecciones causadas por cestodos son tratables; por lo tanto, se justifica una cuidadosa anamnesis y exploración física para identificar a los posibles pacientes.
Los cestodos se adhieren a la mucosa intestinal por medio de un órgano especializado llamado escólex, que tiene una morfología distintiva para cada especie de cestodo. Al escólex se adhieren de uno a varios cientos de segmentos denominados proglótidos. Los proglótidos contienen órganos reproductores masculinos y femeninos y pueden clasificarse en inmaduros, maduros o grávidos, según el estado de maduración de sus órganos sexuales. Un proglótido grávido contiene un útero completamente desarrollado, lleno de huevos. La estructura uterina de un proglótido grávido ayuda a diferenciar las especies de cestodos.
Las infecciones por cestodos, comúnmente conocidas como infecciones por tenias, son una preocupación sanitaria mundial, y España no es una excepción. En España, la prevalencia de estas infecciones varía, con estudios que indican tasas entre el 7,4% y el 31,8% en perros y entre el 7,7% y el 58,0% en gatos. Estas cifras ponen de manifiesto la importancia de vigilar y controlar las infecciones por cestodos tanto en humanos como en animales dentro del país.
La cisticercosis, causada por la fase larvaria de Taenia solium, sigue siendo un importante problema sanitario en España. Las investigaciones indican que la cisticercosis es una de las principales causas de convulsiones y epilepsia en muchas partes del mundo, incluida España.
La Base de Datos Centralizada de Altas Hospitalarias (CMBD) española se ha utilizado para evaluar el impacto de las hospitalizaciones por cisticercosis, proporcionando datos valiosos para la planificación sanitaria y la asignación de recursos.
Infección por Diphyllobothrium Latum
Infección por Taenia Solium
Cisticercosis (Infección por Cysticercus Cellulosea)
Infección por Taenia Saginata
INFECCIÓN POR HYMENOLEPIS NANA
Aspectos esenciales del diagnóstico
- Los gusanos adultos y los proglótidos son raros.
- Huevos esferoidales y de paredes finas (30-47 mm).
- Los huevos contienen dos elementos polares de los que sobresalen 4-8 filamentos (diagnóstico).
- El escólex tiene ganchitos y cuatro ventosas.
Consideraciones generales
La H nana se distribuye por todo el mundo y se denomina tenia enana debido a su pequeño tamaño (2-4 cm). Las zonas endémicas incluyen Asia, África, Sudamérica y Centroamérica, y el sur y el este de Europa. La infección por H nana se adquiere por ingestión de huevos, normalmente de heces humanas. Los huevos eclosionan en el estómago o el intestino delgado, y las larvas resultantes se adhieren a la pared intestinal, donde los gusanos adultos se desarrollan en varias semanas. Los huevos se liberan directamente de las proglótides grávidas mientras éstas aún están adheridas al gusano adulto; por ello, las proglótides rara vez se observan en el examen de las heces. Varios artrópodos, como las pulgas, pueden servir como hospedadores intermediarios alternativos de H nana. Los huevos producidos en humanos infectados pueden provocar una autoinfección interna, y una higiene fecal-oral deficiente puede hacer que la infección se transmita de una persona a otra.
Hallazgos clínicos
Signos y síntomas
La infección por H. nana suele ser asintomática, aunque algunos pacientes pueden quejarse de dolor de cabeza, mareos, anorexia o dolor abdominal. No se sabe con certeza si estos síntomas están relacionados con la infección. Los niños pueden presentar cefalea o trastornos del sueño y del comportamiento, que se resuelven tras el tratamiento satisfactorio de la infección.
Resultados de laboratorio
Como en el caso de los pacientes con otras infecciones por cestodos, el análisis de sangre de los pacientes con infección por H. nana suele ser normal, aunque puede haber una leve leucocitosis con eosinofilia. El examen microscópico de las heces revelará con frecuencia huevos, pero el hallazgo de proglótidos es infrecuente en la infección por H nana.
Diagnóstico diferencial
Dado que la infección por H. nana suele ser asintomática, los pacientes suelen descubrir la infección por H. nana como hallazgo incidental en un examen de heces realizado por otro motivo. En pacientes con molestias gastrointestinales inespecíficas, hay que descartar la úlcera péptica y los tumores malignos. Del mismo modo, en los niños con síntomas conductuales, deben considerarse diversos trastornos neurológicos de origen orgánico y psicológico.
Complicaciones
A través de un mecanismo que aún no está claro, se han notificado convulsiones con infecciones por H nana.
Tratamiento
Los quistes de H nana son más resistentes al tratamiento que los gusanos adultos. Por lo tanto, se requieren dosis más altas o ciclos terapéuticos más largos para erradicar los quistes que en el caso de otras infecciones por cestodos. El tratamiento de la infección por H nana consiste en una dosis única de praziquantel o niclosamida (véase el recuadro 2). Deben realizarse exámenes de seguimiento de las heces a las 2 semanas y 3 meses después del tratamiento.
Pronóstico
Dado que la infección por H. nana suele ser asintomática y responde al tratamiento, el pronóstico es excelente.
Prevención y control
La infección por H nana puede prevenirse con una buena higiene fecal-oral y el cumplimiento de los principios de saneamiento (p. ej., eliminación adecuada de las aguas residuales humanas) (Recuadro 3). La ingestión accidental de artrópodos hospedadores también puede producir infección, aunque este mecanismo de infección es poco frecuente.
Las medidas preventivas en España se centran en el control de los ectoparásitos en los animales y en el medio ambiente, así como en la desparasitación periódica de los animales de compañía. La Unidad de Parasitología Sanitaria de la Universidad de Valencia ha desempeñado un papel decisivo en el apoyo a los esfuerzos por reducir el riesgo de enfermedades parasitarias en humanos y ganado. Su trabajo subraya la importancia de la colaboración entre las autoridades de salud pública y los servicios veterinarios para gestionar y prevenir eficazmente las infecciones por cestodos.
Para obtener información más detallada sobre las infecciones por cestodos y su gestión en España, puede consultar los siguientes recursos oficiales:
- Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social
- Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica.
Estas organizaciones proporcionan directrices completas y actualizaciones sobre la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de las infecciones parasitarias en España.
HYMENOLEPIS DIMINUTA
Fundamentos del diagnóstico
- Los proglótidos son raros en las heces, pero puede haber gusanos adultos.
- Huevos ovoides y de paredes gruesas (70-85 um por 60-80um).
- Los huevos no contienen elementos polares.
- El escólex carece de ganchitos y tiene cuatro ventosas.
Consideraciones generales
H diminuta también se distribuye por todo el mundo, pero la incidencia de la infección es mucho menos común que con H nana. La infección por H diminuta se adquiere por ingestión de huevos, producidos a partir de un hospedador intermediario artrópodo obligado. Los huevos eclosionan en el estómago o el intestino delgado, y los gusanos adultos se desarrollan en varias semanas. Los huevos son similares en tamaño a los de H nana, pero se distinguen por su falta de filamentos polares y su forma ovoide. A diferencia de H nana, el ciclo vital de H diminuta requiere un artrópodo hospedador intermediario, y los gusanos adultos pueden eliminarse en las heces de los seres humanos.
Hallazgos clínicos
Signos y síntomas
La infección por H diminuta no se asocia a síntomas clínicos.
Hallazgos de laboratorio
El examen microscópico de las heces revela con frecuencia huevos y gusanos adultos. El análisis de sangre puede mostrar leucocitosis leve con eosinofilia.
Diagnóstico diferencial
El hallazgo de H diminuta en la infección humana suele ser un hallazgo incidental asintomático.
Complicaciones
No se han descrito complicaciones.
Tratamiento
El tratamiento de la infección por H diminuta consiste en una dosis única de niclosamida (véase el recuadro 87-2).
Pronóstico
El H diminuta responde rápidamente a la terapia, por lo que el pronóstico es excelente.
Prevención y control
La infección por H diminuta puede reducirse disminuyendo la exposición a artrópodos vectores, por ejemplo con medidas de desratización (Recuadro 3).
Infección por Dipylidium Caninum
Infección equinocócica
RECUADRO 1.
Síndrome | Más común | Menos frecuentes |
Infecciónpor Diphyllobothrium latum | Distensión abdominal, dolor abdominal, diarrea | Obstrucción intestinal, deficienciade vitamina B12 |
Infecciónpor Taenia solium | Asintomática | Indigestión, náuseas |
Cisticercosis (infección extraintestinal por T solium ) | Cefalea, convulsiones, déficits neurológicos | Miositis, insuficiencia hepática o cardíaca |
Infecciónpor Taenia saginata | Asintomática | Calambres abdominales, malestar general |
Infecciónpor Hymenolepis nana | Dolor abdominal | Mareos, anorexia; trastornos del comportamiento infantil |
Infecciónpor Hymenolepis diminuata | Asintomática |
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Infecciónpor Dypylidium caninum | Asintomática | Indigestión, anorexia, prurito anal |
Infección equinocócica | Dolor abdominal, masa | Convulsiones, cefalea, déficit neurológico, dolor óseo |
CUADRO 2
Síndrome | Tratamiento adulto | Tratamiento pediátrico |
Infecciónpor Diphyllobothrium latum |
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Infecciónpor Taenia solium |
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Cisticercosis (infección extraintestinal por T solium ) |
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Infecciónpor Taenia saginata |
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Infecciónpor Hymenolepis nana |
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Infecciónpor Hymenolepis diminuta |
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Infecciónpor Dypylidium caninum |
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Infección equinocócica |
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RECUADRO 3.
Síndrome | Medidas preventivas |
Infección por Diphyllobothrium latum | Cocción adecuada del pescado o congelación del pescado durante 48 h |
Infecciónpor Taenia solium | Cocción adecuada de la carne de cerdo o sus derivados |
Cisticercosis ( infección extraintestinal por T solium) | Como para T solium |
Infección porTaenia saginata | Cocción adecuada de la carne de vacuno y los productos a base de carne de vacuno; inspección de la carne de vacuno y destrucción de las canales infectadas |
Infecciónpor Hymenolepis nana | Observancia de una buena higiene fecal-oral |
Infección porHymenolepis diminuta | Medidas de control de artrópodos (como el control de ratas) |
Infecciónpor Dypylidium caninum | Cribado de perros y gatos; tratamiento de animales infectados |
Infección equinocócica |
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